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viernes, 17 de septiembre de 2010

23 Capitulo

Bueno ahora estaba en clase con mi amiga Cass. Yo era un princesa, tenia un novio un amigo y un esclavo de ojos rojos, a bueno y sin hablar del “fantástico” don que tengo. Con todo esto que me fue pasando fui dejando de lado a las otras dos amigas que tenia, pero en parte era mejor. El tener que dejarlas, cuando me fuera, no seria tan doloroso. 

Estaba pensando en contarle todo a Casandra para supiera el por que me marchaba. Naturalmente no le contaría nada ni a Lucas ni a Caleb, pero quizás a Pablo... no a el tampoco podía contárselo. o mucho que fuera de ojos rojos  y fuera malo, no dejaba de ser vampiro. 

Las tres primeras clases trascurrieron rápidas y no nos mandaron apenas tarea. Aunque ahora, al parecer David iba a por Cass y ella era mas dura que yo dando calabazas. Le mando tres veces a la mierda y la cuarta vez que fue a ligar con ella se llevo una patada en sus partes bajas.

-Te juro que como vulva a venir ese tío va directito al hospital.

- Tranquilízate Cass es solo un tío inmaduro.

- E insoportable también.- Añadió. Reí un poco ella.- Oye ¿Estas bien?
Pareces preocupada o algo así.

- Bueno, en realidad no es nada, te lo contare después de las clases.

- Bien, me parece bien. ¿Estas preparada para dormir?

- ¿Qué quieres decir?

-Nos toca con el profesor Mauricio, las clases con el son un coñazo y un aburrimiento.- Nos reímos  a coro, tenia razón, pero al menos mientras podría planear como decirle todo a Cass.

Antes de entrar a clase le mande un mensaje a Lucas y a Caleb diciéndoles  que no vinieran a buscarme. En cuanto lo hice puse el móvil en silencio y me fui a clase con Cass.

Con todo lo que estaba planeando, las tres siguientes clases, se me pasaron tan rápido, como las primeras.
David no se acerco mas a Cass, de forma que ella estaba bastante tranquila. Seria mucho mejor para mí, ya que ahora le contaría todo y como no se me había ocurrido como explicárselo decidí que soltarle todo de golpe seria lo mejor.

Cuando salimos  Caleb estaba en la puerta. ¿Es que no había leído mi mensaje? Le dije a Cass  que me esperara y me acerque a Caleb. Cuando estuve a dos metros empezó a hablar.

- ¿Por que no querías que nadie viniera a buscarte?- Dijo muy serio- Estas planeando algo, a mi no me engañas Zoey. Mas vale que me lo digas, o tendré que llevarte a rastras a casa.- No podía hacer eso, tenia que decirle todo a Cass.        
                                                                                                                               - No podrías hacerlo, no te dejaría.

- Estas a la defensiva. Por lo que veo, no debe de ser nada bueno.

- De acuerdo, te lo contare, pero sea cual sea tu opinión, lo are de todas formas y no podrás impedírmelo.

- Muy bien dime- Dijo, mirándome fijamente a los ojos, con el rostro completamente serio. Creo que nunca le había visto así de serio.

-Voy a contarle todo a Cassandra.- Creí que se pondría  como loco y que intentaría alejarme de ella, para que mantuviera la boca cerrada, pero resulto ser lo contrario.

-Muy bien, ¿quieres que te ayude?

- No gracias  me las arreglare sola.

- Bueno, entonces nos vemos en casa.-Se fue a paso ligero y con la misma expresión seria que había traído.

En parte tenia ganas de terminar con todo e irme a dormir, tenia un sueño, que apenas me permitía mantenerme en pie.
Me acerque a Cass, que esperaba impaciente, para contarle todo de camino a casa. No era el mejor lugar para contar algo así, pero no tenia tiempo para escoger el escenario perfecto.

-Bueno vas a contarme lo que pasa, tanto misterio me pone ansiosa.- Reí por lo bajo y ella siguió mi pequeña risa.

-Bueno, en verdad no se como decirte esto, así que… lo soltare de golpe.
- Claro. Venga dime.

-Cassandra… Soy un vampiro.

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